Atención psicológica a personas adultas
Un alto porcentaje de personas sufren psicológica y emocionalmente a lo largo de la vida. El malestar que experimentamos depende, por un lado, de nuestro contexto, circunstancias, relaciones (familiares, sociales, laborales, etc.) y condiciones del momento y, por otro lado, de nosotros/as mismos/as, de nuestras creencias, nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestros recursos y nuestras estrategias.
Con el tratamiento psicológico se persigue conseguir que las personas que acuden a nuestras consultas se conozcan en profundidad, desarrollen los recursos que necesitan para afrontar las dificultades que aparecen en sus vidas y exploren su capacidad para encaminarse hacia la dirección que desean y construir una vida que les permita sentir la mayor plenitud posible desde la aceptación y la comprensión de sí mismos/as.
Modalidades de terapia
Sesiones presenciales
Sesiones online
En PSICOPAYE, te puedo acompañar durante este proceso de conocimiento, crecimiento y aprendizaje, adaptando el plan terapéutico a tus condiciones y tus necesidades. El objetivo es trabajar una amplia gama de recursos para que puedas gestionar aquello que depende de ti, para así lograr un estado de plenitud y aceptación de uno/a mismo/a.
Las personas acuden a terapia por una amplia variedad de motivos:
Crecimiento personal
Quieren mejorar su salud psicológica y física, desarrollar y estimular su crecimiento personal y su satisfacción vital.
Gestión emocional
Sienten malestar y no saben cómo gestionarlo y aliviarlo.
Acontecimientos difíciles
Atraviesan situaciones difíciles, se desbordan y no se sienten lo suficientemente capaces para afrontar diferentes experiencias dolorosas (pérdida de seres queridos, enfermedades, pérdida de trabajo, rupturas, etc.)
Relaciones problemáticas
Tienen dificultades en sus relaciones sociales, familiares, de pareja, laborales, etc.
Alteraciones psicológicas y físicas
Padecen cierta sintomatología asociada a:
Ansiedad
Fobias, ataques de pánico, ansiedad generalizada, estrés postraumático, obsesiones, etc
Alteraciones del estado del ánimo
Síntomas depresivos, maníacos, etc.
Funciones cognitivas alteradas
Falta de atención, problemas de memoria, alteraciones del lenguaje, apraxia agnosia, etc.
Desórdenes del sueño
Insomnio, dificultad para conciliar el sueño, terrores nocturnos, pesadillas, etc.